Un interesante equipo de harapientos rebeldes cyberpunk se han aliado para derrocar la bestia virtual que es el internet y hacerla caer en sus rodillas sobre el duro asfalto del cyberespacio. Muere, servidor, Muere!

Tuesday, January 17, 2006

shake shake your booty?

alguien más creyó snetir un terremoto ayer como a las 4?

Sunday, January 15, 2006

A pulir la piedra

Este parece ser el primer mensaje del año.

Como muchos de mis lectores (los cuatro) se habrán dado cuenta, yo no escribo "bonito." Mi coordinadora también se habrá dado cuenta que "bonito" no es mi estilo, ya que cada vez que me pide que contribuya a la gaceta del colegio, termino escribiendo un articulo crítico. Rara vez es algo inspirador, enternecedor o que termine por arrancarte un suspiro. (La última que me pidió, que bien podría haber sido un saludo de año nuevo y buenos deseos, terminó por ser una critica a la práctica de nuestros padres de familia de darles celulares a sus hijos, y del miedo o paranoia o inseguridad que eso revela en nosotros como sociedad.)

Bonito y yo no somos amigos, aparentemente.

Sin embargo, como esto parece ser una buena ocasión, haré un esfuerzo (por débil que pueda ser) de sonar alentador, inspirador, arranca suspiros, y, en pocas palabras, bonito.

¿Qué demonios es nuestro año? Le hemos dado tanta atención que al menos en un nivel psicológico ha dejado de ser la mundana medición de la posición relativa de la tierra en su travesía alrededor del sol. Los años los terminamos inventando porque reconocimos ciclos, y su repetición nos afectaba, así que medirlos con precisión nos convenía. Sin embargo, cualquiera que tenga un entendimiento decente del universo podrá estar de acuerdo en que no hay mucha diferencia entre el lugar de la tierra el 31 de diciembre y la del 1 de enero.

A pesar de esto, la enumeración de años, la repetición de ciclos, nos dan un tipo de seguridad. Cada ciclo es más facil de comparar y examinar y tenemos la certeza de que viene otro y tal vez podamos mejorar el anterior.
Si cuidamos nuestras decisiones, podremos mejorar nuestro futuro, cosa que desafortunadamente sólo podemos juzgar en retrospectiva, por irónico que eso pueda sonar.
El año nos cae como una piedra. tenemos una idea de cómo queremos que luzca, pero no sabremos si termina por lucir así hasta el final.
Así que, échenle ganitas y pónganse a pulir su pinche piedra.
Art